domingo, 19 de diciembre de 2010

capitulo 16

            -¿Quién eres?
            -Regina, me llamo Regina ¿por qué huyes de mí?
-Porque eres como ella.
-como ¿quién?
-Alicia…
-a ver. Espera. ¿Me estás diciendo que me parezco a esa humana de la que te enamoraste una vez?
-sí
Me calle un momento y lo observe de nuevo más detenidamente. Su pelo era negro pero sus ojos… eran azules. Un azul que me sonaba y no sabía por qué.
-no soy humana. Soy medio ángel, medio demonio.
-¿mitad y mitad?
Asentí con la cabeza y él se levantó del suelo. De nuevo mi cuerpo se movía solo. Me acerqué a él  y lo obligue a mirarme a la cara.
-Alberto te recuerdo que nada es lo que parece.
Me miró sorprendido pero seguí.
-hay que dejar atrás el pasado. Hay cosas que es mejor olvidar y a…-casi digo mí- Alicia es una de ellas.
-¿quién eres tu para decirme que es lo que debo olvidar?
Estaba enfadado pero mi cuerpo seguía sin hacerme caso. Intenté expulsar a aquello que me nominaba, pero no lo conseguía.
-soy Alicia. He poseído a Regina. Apenas puedo aguantar poseyéndola pero cuanto más luche contra mí más podre tiempo me puedo quedar en su cuerpo. Un consejo. Olvídame. Yo lo hice. Por eso viví feliz con mi marido. Morí tras tener un bebé. Apenas habían pasado diez años desde nuestro adiós. No busques mi lapida porque no la encontraras. Pedí ser quemada. Regina es algo así como mi sucesora. Por eso puedo poseerla. Vive tu vida. Jamás debiste haberte enamorado de mí. Tú deberías haberte enamorado de alguien de tu especie. No de la mía. Me voy. Dejo a Regina que se está empezando a enfadar.
Rio y se acercó a Alberto. Posó mis manos sobre su pecho y lo beso. Tras eso. Por fin tenía ya el control de mi cuerpo. Lo primero que hice fue separarme y ponerme roja.
-lo siento-dije-yo no quería.
-no pasa nada.
-¿sabes? Es extraño. Antes de recuperar el control de mi cuerpo escuche a mi cabeza decir “lucha por él es tu pareja”.
Me miraron con los ojos como platos.
-¿qué?
-Regina… si ella te dijo eso… es que sois pareja. Los fantasmas rara vez se equivocan- dijo Ángel.
-el problema es que no recuerdo nada. Y eso me cabrea. Quiero saber más acerca de mí.
-espera. Has dicho que no recuerdas nada. ¿Eso quiere decir que…?
-sí. Eso quiere decir que no tiene memoria. Tiene amnesia.
-mi poder es la memoria y el ver recuerdos. A lo mejor puedo ayudar.
-inténtalo. Porque yo ya me canse.
-ven Regina. Túmbate en la cama.
Le hice caso y me tumbe. Él se puso encima mía y puso sus manos sobre mi cabeza. Empecé a sentir frío pero…poco a poco iba recuperando la memoria. De pronto lo recordé todo. Mi antigua casa, Kitty, Dino, Lilia, el instituto, Tin, Arturo, el accidente… empecé a llorar descontroladamente. También recordé donde había visto antes los ojos de Alberto. En mis sueños. Hay los había visto.
-gracias…-él se levantó y me ayudo a sentarme. Estaba frente a mí, todavía sosteniendo mi mano en la suya. Me levante,  me acerque a él y lo bese. El correspondió al beso y Ángel salió de la habitación un tanto incómodo.
Alberto me echó en la cama y se puso encima mía. Seguimos besándonos y la ropa empezó a desaparecer. Tan solo nos quedaba la interior pero también desapareció en cuestión de minutos. Busco en los cajones y encontró lo que quería.se lo puso y siguió besándome. Antes de que me diera cuenta. Me penetró. Reprimí el grito que estuve a punto de soltar. Llegamos al máximo placer y se tumo a mi lado.
-dime una cosa Regina. ¿Hace cuánto que estas en el colegio?
-poco. O sea… menos de un día ¿por?
-Por saber. ¿Cuál es tu poder?
-tengo dos. La tele transportación y el de hacer aparecer fuego de la nada.
-el segundo no lo he visto nunca. Pero el primero sí. Lo vi hace 1500 años.
-mira que eres viejo…
-mira que eres pequeña…
Lo mire mal pero paso de mí.
-aun no has hecho el ritual.
No era una pregunta. Era una afirmación.
-vámonos. Tengo que hablar con la actual directora.
Nos vestimos y nos fuimos. Llegamos a la dirección y Cintia, la directora, le pidió que pasara. Al vernos juntos se sorprendió.
-Regina siento decir esto pero… eres peor que tu madre-dejo de mirarme y se fijó en Alberto-ya era hora de que te despertaras. Que, ¿lo consiguió Regina?
-sí. Alicia la poseyó.

3 comentarios:

  1. me ha encatado tu historia no puedo esperar a leer el siguiente capitulo porfabor subelo pronto

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  2. aaaayyyy no tardes en subir porfaaaaaaa
    me a encantado este capitulo =)
    un besaazzooo ;)

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  3. Holaa!
    Me gustoo bastante el capitulo, esta interesante!
    Publica pronto!un beso! :)

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